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domingo, 11 de junio de 2023

HUGO MALLO


NOMBRE COMPLETO Hugo Mallo Novegil
FECHA DE NACIMIENTO 22 de junio de 1991
LUGAR DE NACIMIENTO Marín (Pontevedra)
DEMARCACIÓN  Lateral derecho
DORSALES 12, 2
CLUB DE PROCEDENCIA Celta Juvenil 
TEMPORADAS EN EL CLUB 14 (2009-23) 
PARTIDOS 449
GOLES 12
CLUB DE DESTINO Inter de Porto Alegre (BRA)
CLUB ACTUAL Inter de Porto Alegre (BRA)

Uno de los grandes capitanes en la historia del Celta, defendió la camiseta del Celta durante 14 temporadas, siendo uno de los jugadores que más partidos oficiales jugó con el club vigués a lo largo de su historia. 

Lateral derecho nacido en Marín, el pequeño Hugo dio sus pasos en el Salgueiriños, un equipo de Pontevedra, cercana a su localidad natal. No tardó en destacar y en categoría infantil fichó por el Pontevedra, donde tras un solo año dio el salto a las categorías inferiores del Celta. Ya no se iría del club vigués hasta 2023. 

En la Temporada 2008-09 formó parte de una de las mejores generaciones de juveniles del Celta, que alcanzó la final de la Copa de Campeones. Joselu, Rodrigo,  Toni Dovale, el propio Hugo Mallo o los hermanos de Paul Pogba, eran algunos de los componentes más destacados de aquel equipo. 

Uno de sus primeros amistosos con el Celta

Su debut oficial, en agosto de 2009 ante el Numancia

Sus buenas actuaciones en el juvenil llamaron la atención de Eusebio Sacristán. El técnico castellano lo convocó para realizar la pretemporada con el primer equipo, aunque la idea era que se incorporarse al filial de cara a la Temporada 2009-10, ya que en ese momento contaba con dos laterales derechos: Vasco Fernandes y Edu Moya. Sin embargo la denuncia por impago de este último provocó que fuese apartado y el entrenador celeste decidió apostar por el joven Hugo Mallo. 

El 29 de agosto de 2009 debutaría oficialmente con el Celta, en un partido de Segunda División ante el Club Deportivo Numancia. Fue el primero de los 449 partidos oficiales en los que llegaría a defender la camiseta celeste. Su primer partido no fue como lateral derecho, sino como lateral zurdo, ya que Roberto Lago sufrió un golpe de calor y tuvo que se reemplazado tras el descanso. 

En su primera campaña con el Celta disputó un total de 30 partidos oficiales, 22 de ellos como titular. El canterano firmó un contrato profesional de cinco temporadas con el club céltico, y al final de esa campaña fue convocado para disputar la Eurocopa Sub-19. 

Jugando ante el Elche en el Martínez Valero

En la Temporada 2010-11 se asentó en la titularidad

En el verano de 2010 llegó Paco Herrera al banquillo celeste. Vasco Fernandes ya no estaba y Hugo Mallo se hizo con el dorsal 2, del que sería propietario durante 13 temporadas. A partir de esa temporada ya sería titular indiscutible, y además el Celta llegaría a disputar la promoción de ascenso a Primera División, con el marinense como uno de los jugadores más destacados. 

En el verano de 2011 sería convocado por la selección española Sub-20 para la disputa del Mundial de la categoría en Colombia. El de Marín disputó los 5 partidos del combinado español, que caería eliminado en los cuartos de final. Su destacada actuación le hizo merecedor de la nominación para el Balón de Oro del campeonato. 

La Temporada 2011-12 fue la campaña de consolidación de Hugo Mallo y del proyecto de Paco Herrera al frente del Celta. Su rendimiento empezaba a llamar la atención de clubes importantes y los rumores sobre una inminente salida eran constantes. Se llegó a dar por hecho su fichaje por el Atlético de Madrid, aunque el madrileño no fue el único equipo con el que se le relacionó. El teléfono de su representante echaba humo por esas fechas. 

En 2012 logró el ascenso a Primera con el Celta

Su debut en Primera División fue ante el Málaga en Balaídos

Este fue un hecho importante para entender esa campaña. La edad, la presión, los rumores, el hecho de hacer una pretemporada extraña por la convocatoria para el Mundial Sub-20, fueron alguna de las causas que explicaron su bajo rendimiento en las primeras jornadas de Liga. Pero Hugo Mallo no tenía recambio, una constante en su carrera, por lo que no quedaba más remedio que esperar a que cogiese el ritmo adecuado. 

Y lo consiguió. Con el paso de las jornadas fue alcanzando un buen nivel, aunque en líneas generales su temporada no fue espectacular, sí que es cierto que le sirvió para asentarse en el primer equipo, y adquirir una experiencia que le vendría muy bien para el futuro. Además el equipo logró el ascenso de forma brillante, lo que le permitía debutar en la máxima categoría. 

Con el Celta en Primera División, la dimensión del marinense iría cada vez a más. La primera parte de la temporada fue sensacional, hasta el punto de colarse en las quinielas para la selección española. Su adaptación a la categoría fue sorprendente. La presencia de un extremo muy comprometido como Augusto le ayudó, firmando grandes marcajes, como el de Cristiano Ronaldo en un partido de Copa. 

La grave lesión sufrida en 2013 ante el Real Madrid de Ronaldo

Midiéndose a Aduriz en un Celta - Athletic 

Y precisamente en esta eliminatoria, pero en el partido de vuelta disputado en el Santiago Bernabéu, llegó una desgraciada lesión que le apartó de los terrenos de juego en uno de los mejores momentos de su carrera. En una desafortunada acción, los ligamentos de su rodilla se rompieron en mil pedazos, poniendo fin a su temporada. 

Pero a pesar de que no volvería a jugar, seguiría siendo protagonista en aquel curso. Lesionado, no pudo viajar a disputar el derbi ante el Deportivo en Riazor, pero estaría presente en el estadio y no pasaría desapercibido. En uno de los autobuses que desplazaban a la afición estaba Hugo Mallo, que se dejó fotografiar con un cartel de “Se Vende”, en una puya a los problemas económicos del club herculino. Posteriormente, ya en la grada del estadio coruñés, se le vio haciendo gestos obscenos a la afición rival, un acto que sería muy criticado y cuestionado, entre otros, por el seleccionador nacional Vicente del Bosque, que le cerraba la puerta de la selección por este comportamiento. 

Pugnando con el barcelonista Neymar en Balaídos

Imagen de un Valencia - Celta en Mestalla

El Celta, que había logrado una salvación agónica en su regreso a Primera División, cambiaba de entrenador en el verano de 2013 con la llegada de Luis Enrique. Hugo Mallo continuó esa temporada su progresión como lateral derecho, una posición de la que era dueño desde hacía varios cursos a pesar de su juventud. El de Marín dio un salto más en su importancia dentro del equipo, al margen de su hacer en el terreno de juego, llegó a ejercer de capitán del equipo en más de una ocasión. Hugo Mallo ya tenía galones en el Celta, y lo demuestroba tanto dentro como fuera del campo. 

Durante la temporada volvió a demostrar un alto nivel competitivo, aunque tal vez no alcanzó el tope de rendimiento de la anterior campaña, quizás su mejor momento deportivo antes de la lesión que le apartó de los terrenos de juego durante seis meses. Recuperado totalmente de aquella dolencia, se reincorporó al equipo ya en pretemporada y nadie fue capaz de discutirle su puesto en el once inicial celeste. 

Su progresión era palpable, especialmente en ataque, donde cada vez tomaba mejores decisiones. Asimismo, seguía siendo un referente en la zaga, donde era un auténtico perro de presa con los extremos rivales. Coronado como uno de los mejores jugadores del equipo, según las notas que los lectores de moiceleste dan a los jugadores tras cada partido, Hugo Mallo cerró la temporada con 33 partidos en Liga, de los cuales solo uno de ellos fue suplente. Se perdió las últimas jornadas por una lesión en el hombro producida ante el Real Valladolid.

Firmando su última renovación con el Celta

Recogiendo un balón de Simeone en el desaparecido Vicente Calderón

Tras firmar una buena temporada, Luis Enrique se marchó al Barcelona. El Celta eligió a Berizzo para dirigir al equipo en la campaña 2014-15. A Hugo Mallo volvieron a perseguirle las lesiones, por eso sus estadísticas no lucieron demasiado, disputando 28 partidos oficiales, 27 de ellos como titular. El jugador comenzó renqueante, por los problemas físicos que arrastraba de la recta final de la temporada anterior, por lo que comenzó siendo suplente. 

Pero con el tiempo se hizo con la titularidad, desplazando a Jonny Otto, que empezó jugando como lateral derecho, al perfil izquierdo. Su rendimiento fue in crescendo con el paso de las jornadas, un clásico de su rendimiento, llegando a alcanzar un gran momento en la recta final del campeonato, coronándose como uno de los jugadores más regulares del equipo. Además, el 23 de mayo de 2015, en la última jornada de Liga frente al Espanyol en Balaídos, anotó su primer gol en la máxima categoría. 

La Temporada 2015-16 fue especial para Hugo Mallo en muchos aspectos. Por un lado el equipo regresaba a Europa después de diez años, y lo hacía con el de Marín como capitán, heredando el brazalete que dejaba Augusto Fernández tras fichar por el Atlético en el mercado de invierno de esa temporada. 

La semifinal de Copa de 2017 ante el Alavés

Hugo Mallo tras la dolorosa eliminación en la Europa League en Manchester

A nivel personal, el canterano firmó la temporada más regular hasta entonces de su carrera. Nunca antes había jugado tanto. Solo se perdió cuatro partidos, cambiando la dinámica marcada por las lesiones de las campañas anteriores. En esta temporada reverdeció laureles actuando en ocasiones como defensa central, una demarcación que había ocupado en las categorías inferiores del Celta. Para el recuerdo personal quedaría también su paternidad y un gol espectacular ante el Valencia en Mestalla. Impropio, por su ejecución, de un defensa. 

Con el regreso a Europa, Hugo Mallo vivió la que posiblemente fue su temporada más completa, confirmando el crecimiento experimentado el año anterior, también a las órdenes de Eduardo Berizzo. Disputó un total de 41 encuentros oficiales, y llegó a anotar 3 goles, algunos muy recordados, como el que abría la goleada en el derbi ante el Deportivo. Por supuesto también es imposible olvidar aquel tanto en Krasnodar que acercaba al elta a los cuartos de final de la Europa League, que no alcanzaba desde hacía 16 años. 

Con Manolo, otro histórico capitán del Celta

Midiéndose a Messi en el Camp Nou

Fueron momentos muy destacados, pero su trabajo nunca fue marcar goles sino evitarlos, y ese año su faceta defensiva alcanzó las cotas más altas. Entonces ya se le veía como una leyenda en potencia, un futbolista que aspiraba a superar el récord de partidos de Manolo, el gran capitán de los años setenta. El equipo, además, completó una gran campaña, alcanzando las semifinales en la Copa del Rey y en la Europa League. 

En el verano de 2017 se produjo un cambio significativo en el Celta, con la marcha de Eduardo Berizzo tras tres brillantes temporadas. Juan Carlos Unzué, que ya había sido segundo de Luis Enrique tres años antes, tomaba el relevo del técnico argentino, aunque para Hugo Mallo esto no supuso un cambio excesivo, ya que mantuvo el nivel mostrado en años anteriores, e incluso creciendo en algunos aspectos. 

En esta campaña pudo corregir los flojos arranques de temporada de otros años, ofreciendo un buen rendimiento desde los primeros partidos, siendo capaz de sostenerse durante casi todo el curso. Cerró el curso con 38 partidos jugados, todos ellos como titular, repartiendo cinco asistencias de gol. 

Ante el excéltico Sergi Gómez en un Celta - Sevilla 

Imagen de un partido disputado en el Sánchez Pizjuán

A pesar del buen año de Hugo Mallo, no lo fue tanto a nivel colectivo. El Celta de Unzué empezó bien pero se fue desinflando con el paso de las jornadas, por lo que el técnico navarro no siguió. El Celta fichó para comenzar la temporada al argentino Antonio Mohamed, que no duraría mucho, siendo sustituido por el portugués Cardoso. 

Esta fue una de las campañas más complicadas de Hugo Mallo por el rendimiento del equipo, especialmente a raíz de la lesión de Iago Aspas en el mes de enero. El equipo se cayó por completo y a muchos jugadores se les vieron las costuras, Hugo Mallo entre ellos. 

El de Marín fue claramente de más a menos, justo lo contrario de lo que suele ser habitual para un jugador que parece entonarse con el paso de las jornadas. Sin embargo en esta ocasión el peso de la temporada le afectó, y la responsabilidad de la mala situación deportiva vivida por el equipo supuso una losa que afectó directamente a su juego. A Hugo Mallo no se le vio la alegría ofensiva de otras campañas, y en defensa sufrió más de lo habitual. 

Futbolista de carácter, como se observa en la imagen

Tras la agónica salvación lograda en Cornellà ante el Espanyol

El Celta logró una salvación agónica, llegando a estar a cuatro puntos de la permanencia. Llegó Fran Escribá al rescate, y sobre todo Aspas, recuperado de su lesión, quien llevó en volandas al equipo hasta la permanencia, pero en esos momentos en los que un capitán debe tirar del carro, se echó de menos la mejor versión de Hugo Mallo. 

La caída del capitán céltico no se frenaría. La campaña 2019-20 no fue mejor. Volvió a vivir un año marcado por los problemas físicos, ofreciendo un rendimiento muy inferior al de campañas anteriores. La temporada comenzó mal, perdiéndose el debut ante el Real Madrid por una lesión, y posteriormente tendría problemas por una pubalgia y una lesión en el pie en la recta final. 

Llegó a perder la titularidad en algún momento de la temporada, en favor de Kevin, que había subido del filial el año anterior para competirle el puesto. La competición se paralizó en el mes de marzo de 2020 debido a la pandemia de Covid-19, y cuando volvió el fútbol Hugo Mallo lo hizo a un nivel muy bajo, en gran medida porque jugó varios partidos con un dedo del pie roto. El equipo, que había cambiado de técnico a mediados de temporada, llegando Óscar García al banquillo, sufrió muchísimo para salvarse y lo hizo de forma agónica, dependiendo de otros resultados en la jornada final. 

Choque de puño con Mouriño en la pretemporada de 2020

Con Coudet alcanzó sus mejores cifras goleadoras: 4 en la 2020-21

Pero volvamos a Óscar García, porque haría vivir a Hugo Mallo uno de sus peores momentos. El técnico catalán siguió en el equipo, que no acababa de arrancar en las primeras jornadas, donde se produjeron desagradables cruces de declaraciones entre el técnico y el capitán, que sería desposeído de su brazalete por el preparador, que llegó a insinuar que Hugo Mallo había pedido salir del club en el verano. 

Finalmente los malos resultados acabarían con Óscar García defenestrado. En su lugar llegó Eduardo Coudet, y la vida de Hugo Mallo dio un vuelco. El preparador argentino le devolvió el brazalete de capitán, y el de Marín le brindó una de sus mejores temporadas a nivel individual, alcanzando sus mejores cifras goleadoras con cuatro tantos, y con muchísima presencia en el área rival, fruto del sistema ofensivo del “Chacho”. Seguramente fue una de las temporadas en las que más disfrutó jugando al fútbol. 

En el verano de 2021 el Celta refrendó su apuesta por Eduardo Coudet, con un contrato de tres años más. Se las prometía felices Hugo Mallo, con un técnico con el que había recuperado su mejor fútbol, pero desde el inicio ya se intuía que su mejor momento podría haber pasado. Su campaña estuvo marcada por las lesiones, y no pudo empezar peor ya que en el debut liguero fue expulsado ante el Atlético de Madrid después de enzarzarse en una pelea absurda, impropia de un futbolista experimentado como él, con un jugador del equipo colchonero. 

Camiseta homenaje del Celta por sus 400 partidos oficiales

Ante el Levante del "Comandante" Morales en el Ciutat de Valencia

Problemas físicos lo mantuvieron fuera de los terrenos de juego entre octubre y noviembre, y acabó la temporada de forma prematura debido una fractura en el borde exterior de la rótula de su rodilla derecha, sufrida en un partido disputado ante el Betis el 20 de marzo. Cuando el físico le respetó cumplió como en él viene siendo habitual, e incluso marcó un gol, ante Osasuna en la jornada 21. 

La Temporada 2022-23 empezó para Hugo Mallo como una más. Muy pocos sospechaban que se estaba acercando el final de su etapa en el Celta, con quien le quedaba ese año de contrato. Desde el verano se habló mucho de su renovación. El futbolista decía que solo tenían que sentarse y plantearle la oferta, y el Celta insistía en que estaba pendiente del jugador. La intención de ambas partes era seguir unidos hasta el final de la carrera del de Marín. 

Pero el tiempo iba pasando sin resolución, mientras que Hugo seguía siendo titular, pero muy lejos del rendimiento que le había convertido en una leyenda del Celta. En el mes de noviembre caía Eduardo Coudet, despedido tras una serie de malos resultados, y la vida de nuestro protagonista volvió a 2020. Unos problemas musculares lo apartaron del equipo en los primeros partido del nuevo técnico, el portugués Carlos Carvalhal. 

Fue el primer jugador en alcanzar los 300 partidos en Primera con el Celta

Su último partido en Balaídos fue ante el Girona 

Manteado por sus compañeros tras la salvación ante el Barcelona

Tras recuperarse disputó 4 partidos seguidos, pero ante el Athletic fue suplente, una situación casi inédita desde que dio el salto al primer equipo en 2009. Además el técnico aseguró en una rueda de prensa que no estaba para jugar después de que en el mes de enero pidiera salir rumbo a Brasil, para enrolarse en el Atlético Mineiro que dirigía Eduardo Coudet. Fue ahí donde todo se torció con el Celta. Esa petición fue cruzar el Rubicón para Hugo Mallo. 

En lo deportivo volvería a ser titular tras la lesión de Mingueza, que había sido el jugador que le quitó el puesto. En las últimas jornadas alternó titularidades con suplencias, pero acabó la temporada y su estancia en el banquillo, con un rendimiento muy lejos de sus mejores días. Su último partido en Balaídos fue ante el Girona. Tras el mismo, enfadado por el resultado que seguía dejando al Celta en vilo por la permanencia, golpeó con su mano una valla y sufrió una lesión que casi le impide disputar los últimos encuentros. Fue el triste epílogo a una fantástica e inolvidable carrera en el Celta, que le ofreció una triste y discreta despedida con una rueda de prensa cerrada al público y que ni tan siquiera fue emitida en directo por los medios del club. 

Tras varias semanas sin equipo el 14 de agosto de 2023 el Internacional de Porto Alegre anunció la incorporación de Hugo Mallo, que reencontraba en el banquillo Gaúcho con Eduardo Coudet, quien fue su entrenador durante dos años en el Celta, alcanzando las semifinales de la Copa Libertadores en su primera temporada. 


TRAYECTORIA

Temporada Club Categoría País PJ G
2009-10 RC CELTA España 25 0
2010-11 RC CELTA España 28 1
2011-12 RC CELTA España 34 0
2012-13 RC CELTA España 17 0
2013-14 RC CELTA España 33 0
2014-15 RC CELTA España 28 1
2015-16 RC CELTA España 34 1
2016-17 RC CELTA España 23 2
2017-18 RC CELTA España 34 0
2018-19 RC CELTA España 35 1
2019-20 RC CELTA España 27 0
2020-21 RC CELTA España 31 3
2021-22 RC CELTA España 21 1
2022-23 RC CELTA España 26 0
2023 Internacional Brasil 6 0
2024 Internacional Brasil

INTERNACIONAL

Selección Categoría Debut Último PJ G
España Sub-21 2011 2012 3 0

VÍDEOS



2 comentarios:

  1. Tendes algúns erros no texto. Mencionades Eduardo Berizzo no canto de Coudet como substituto de Òscar Garcia e o clube Salgueiriños non é de Marín, senón de Pontevedra. Saúdos.

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